Lo digo cada mañana. ¿A quién se le ocurrió que el despertador pitara de esa manera? ¡Qué desagradable! ¿No pueden inventar uno para single´s que diga buenos días princesa o cariño llegas tarde? Que sí, que moñas es un rato pero ese pitido que se te clava en la sien te hace estar de mal café hasta que te lo tomas. Pero y cuando sabes que es para llevarte a una isla paradisiaca que me decís...que ya puede sonar como quiera y que salga el sol por Antequera.
Lo haces callar a modo de puñetazo, coges tus maletas, el taxi, te plantas en la T-4 y cuando te quieres dar cuenta media tripulación te está pidiendo que apagues el móvil y tu taquicárdica empeñada en no desconectar. Espera que lo pongo en las redes sociales y depende de cuantas tengas el vuelo se augura con retraso.
En fin...que llegué, desconecté y no sabéis de que manera. Eso de ponerte el bañador en invierno, escuchar lo que el mar te quiera decir y descubrir horizontes perdidos hace que recobres el norte a golpe de brisa. Y así sin más, tras varios días de calma puse rumbo nuevamente al aeropuerto con mis dos millones de maletas y en mis cascos el programa "De vuelta a casa" mientras esperaba eso mismo y amontonaba fuerzas para volver a esta ciudad que tanto me divierte, que tantos buenos momentos me da y la que cada día me saca la mejor de las sonrisas. Porque a veces... necesitamos del mar para que nos arrastre nuevamente a la orilla.
Y después de esto descubro los outfits:
Look 1- Camiseta marinera con botones dorados en los hombros de Massimo Dutti, shorts de Zara y manoletinas de Hakei.
Look 2- Camiseta H&M, collar de Suite Blanco, falda del Showroom París en Madrid, cartera con tachas de Zara y zapatos de piel en beig de Mango Touch. (Hice fotos de cada cosa a parte porque no se ve demasiado bien)
¡FELIZ MARTES! Recuerda que me puedes encontrar en @verasbackstage
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