Mil razones en mi vestidor: Desfile The 2nd Skin Co

¡Buenos días! Visto el éxito que están teniendo los post en los que os muestro los desfiles voy con el que para mi fue el mejor de Madrid Fashion Show. The 2nd Skin Co se hizo esperar, el último día y el penúltimo que el Museo del Traje veía el arte de la moda. Llegué corriendo y casi sin respiración pensando que me iba a perder la marca española que triunfa en Hollywood. No iba muy bien de tiempo puesto que entre desfile y desfile aprovecho para hacer mil cosas si no me quedo al cocktail. Suele haber hora y media y la exprimo al máximo por lo que llegué más que justa. Carreras por los jardines para que las chicas me indicaran el lugar en el que me tenía que sentar. Nada de eso, la última en cerrar el espacio acotado y a los tres segundos silencio, la gente expectante y la música en sus primeras notas.

Debido a eso decidí ver un desfile por lo menos una vez en la vida tranquila, sin mucho ajetreo de móvil, tuits informando (cayeron dos) y todo eso que no te permite en profundidad disfrutar de un trabajo costoso que muchas veces la gente no ve o se imagina todo lo que hay detrás para que una colección salga. El otro día una famosa diseñadora colgó una foto en su red social que era la punta de un iceberg y un bloque de hielo enorme que no se veía sosteniéndolo. Todo eso es lo que hay detrás, todo lo que no se ve pero existe para que esto salga. Como os decía lo disfruté tanto y fue tan bonito que amablemente desde el departamento de comunicación The 2nd Skin Co me han mandado estas bonitas fotos. La primera es mía y ya sé que dar la espalda no es muy ético pero lo que más me enamoró de la colección fueron las espaldas. Al aire, con enormes lazadas... ya sabéis lo que me apasionan los lazos y las mangas abullonadas, otra constante del desfile. Pantalones de talle alto, mini vestidos, vestidos camilleros, túnicas hasta el suelo... Con un aire claro y mágico pasamos de golpe a los años 70, la época fetiche de la colección.

Sublime el recorrido a la época, soñando despierta con sus tejidos en organza de seda natural con flores de Fil Coupé en hilo de Lúrex, satenes, micados... Pude comprobar la textura de algunos de ellos por el precioso detalle que daban a las invitadas. Os aseguro que vi un espectáculo en todo los sentidos aunque por una vez creí estar en Palm Springs en casa de los Kaufmann. Mil besos en el corazón, mañana más.