Mil razones en mi vestidor: Un día de Press Day

¡Hola a todos! El día de ayer debería pasar a llamarse "Ser Periodista de Moda y no morir en el intento". Y creo que todos mis compis aplaudirían la propuesta. Ayer vimos unas cuantas colecciones en decenas de Press Days a los que fuimos. Pero los que no están dentro de este mundillo que alguna vez me lo han preguntado que no saben qué quiere decir yo lo explico. Son presentaciones de las colecciones, la mayoría en esta época ya son para el verano, a la prensa especializada en moda. Todo lo que se va a llevar dentro de unos meses y que veremos en la calle. Os he puesto muchas veces press days por aquí para que veáis pinceladas pequeñas de lo que nos pondremos. Es verdad que este año por el tema de las copias están un poco más estrictos que las demás temporadas así que os enseño una parte muy muy pequeñita de todo lo que pude ver ayer. En general os voy a contar un poco mi día sin estresaos tanto como lo hice yo.

Por las noticias sabréis que la contaminación es altísima en Madrid y no se puede circular por las radiales a más de 70. Pues bien, mi día empezó con un monumental atasco. Me costó llegar al centro una hora, eché parquímetro, perdón, me atracaron, porque la zona azul es un atraco en toda regla y luego me fui de press days. Una vez en las agencias me encontré a mil compis y amigos y pasa lo que pasa... que se te va el tiempo. ¿Quedamos para un café? Espera que saco el móvil, la agenda, la disponibilidad... ¿Os acordáis ese juego de los círculos de colores que era una alfombrilla que había que poner una pierna, una mano, ahora te toca a ti tal y cual...? Pues estábamos así todos. Haciendo malabares para cuadrar agenda y sacar un hueco más allá de encontrarnos por las agencias de comunicación. Entre ver la ropa, complementos, saludar a mengano, picar algo para poder continuar me topé con un... ¿loro? No... no era un loro. Perdonadme pero en "bichos" no estoy muy puesta. El caso es que fui a Nota Bene y entre sandalias Hawaianas me lo encontré ¿Es de verdad? ¡Claro! Mi madre qué susto. No sé si le maté más la cabeza yo a él o él a mí. Digo éste hasta que no diga Mil Razones en mi Vestidor no lo dejo tranquilo.

A ver si la competencia me va a coger ventaja. En fin... un show. Como siempre dar las gracias a todos los que me invitaron para ver tooooodo lo que llevaremos, algunas colecciones son un lujo verlas ya en directo. Después de todo esto y para acabar el día reunión de equipo. Directas al Starbucks y nada de quitar los vasos rojos navideños como afirmaba un periódico de tirada nacional. Le dije al chico que me atendió ¿Ya de Navidad? Desde hace dos semanas me dijo. Jesús qué estrés la vida moderna. Yo me bajo del mundo por hoy. Mil besos en el corazón, el lunes paso lista.